XBOX 360 – “…Y DIOS DIJO: HÁGASE LA LUZ…”

Increíble. Posiblemente existan cientos de reanálisis sobre esta consola. Posiblemente habréis leído la mayor parte de esos reanálisis. Posiblemente creáis que es XBOX360, pero yo os aseguro que no lo podéis imaginar.

Puedo reconocer que soy un "entendidillo" en el mundo de consolas (tampoco un experto). Reconozco que leo casi todo lo que cae en mis manos sobre consolas y he de reconocer que por mucho que he leído análisis de la XBOX360 no me hacía, ni por asomo, una idea de todo lo que ofrece esta maravilla.

Recientemente me la he comprado (casi un año después de que saliera a la venta). Creedme la primera sensación física que se tiene con esta consola es que es enorme, pesa mucho y tiene una fuente de alimentación descomunal. Pero también te das cuenta de que estás ante una máquina muy sólida y de gran estabilidad.

Tras meter mi primer juego (Prey) te surgen las primeras dudas. Si… bueno…, parecen mejores gráficos…, pero no es tanta la magia… ¡¡cuidado!!, es la primera sensación… Cuando sigues jugando…, cuando pruebas otros juegos te das cuenta de que estas ante algo grande. Hay momentos en los que los pelos se ponen de punta al ver tamaña calidad gráfica, y un escalofrío recorre toda tu espalda. Sinceramente, nunca había visto algo así, creedme.

El mando es cómodo. Incluso diría que llega a ser tan cómodo como el mando de Nintendo GameCube. Pero por encima de todo, no te das cuenta que ese mando es inalámbrico. Recuerdo otros mandos inalámbricos para otras consolas que tenían siempre un "ligero" retardo entre la pulsación y la acción. Este mando es instantáneo… sinceramente parece que estás jugando con un mando con cable de los de toda la vida. El único punto negativo es que no incluye baterías recargables de serie. Tienes que comprar una baterías que venden por alrededor de 20 €, cargador incluido.

Pero si después de la sensación de grandiosidad, la inmensa calidad gráfica y el mando no han conseguido que te palpite el corazón (me extrañaría) llega el momento de acceder a Xbox Live. Con una simple cuenta de correo hotmail ya puedes crear un usuario de Xbox Live. Pero no sólo eso, además, puedes descargarte tantas demos de juegos actuales que ni el disco duro es capaz de tenerlas todas… Así puedes probar los juegos y "saborearlos" antes de gastarte 65€ (un sobresaliente para Microsoft)… pero ahí no me quedo, existe una cosa llamada Xbox Live Arcade que tiene juegos arcade antiguos y conocidos por todos. Todos estos juegos tienen versiones gratuitas para recordar viejos tiempos y versiones "extendidas" de más calidad que se pueden pagar con los puntos Microsoft… tuve que secarme las lágrimas cuando pude volver a jugar al Doom original… que recuerdos… que alegría… una matrícula de honor para Microsoft.

En definitiva, Xbox Live es un servicio, a todas luces, sólido, coherente, sencillo que deja en pañales a los servicios del resto de compañías de consolas.

Quisiera analizar en esta entrada tres de los juegos que he comprado con la consola. Uno de ellos, Prey. La única palabra que puede definir a este shooter es "grandiosidad". Deliciosos efectos de luz, texturas casi palpables, movimientos suaves, y una genial sensación de "angustia", "pánico". El hecho de moverte por las paredes y por el techo es indescriptible, unas armas que ni la imaginación de George Lucas podría concebir… en definitiva, para mi, el mejor shooter al que he podido jugar desde hacía años.

El otro juego se trata de Oblivión. Yo ya disponía de la versión PC de este juego, pero incluso teniendo un muy buen ordenador, no le llega, ni por asomo, a los gráficos y fluidez que le da la Xbox360 (y tengo un pentium IV a 3,2 con 2GB de RAM y una tarjeta gráfica de 512MB). Por supuesto un juego muy recomendable, entretenido y que te permite una libertad pocas veces vista en juegos.

Por último el tercer juego es Kameo. Este juego que perteneció a la hornada de salida de la Xbox360 hace casi un año, y su calidad es realmente indescriptible. Como habréis podido observar en otras de mis entradas del blog, soy un enamorado de los juegos de Nintendo, ya que en otras consolas no suelen verse cosas como en las de Nintendo… por supuesto hasta que he empezado a jugar a Kameo. Notas a primera vista que es una tremenda aventura, con unos gráficos que habría firmado el mismísimo Shigeru Miyamoto (padre de Mario, Zelda, Donkey, etc.). Pero hay que señalar que tiene una aventura y una historia tan bien realizada, unos niveles tan bien cuidados, unos "jefes finales" tan tremendos que en algunos momentos pensé que estaba jugando a "The legend of Zelda" en vez de a Kameo. Las transformaciones de nuestra protagonista (o espíritus) son muy imaginativas, y la dificultad muy ajustada. En definitiva, es un juego "must have" que, como dice la palabra todos debemos tener.

Hace tiempo dije en una de mis entradas que había que girar un poco el cuello para ver que existen alternativas en el mercado. Hoy puedo decir a aquel que duda si comprarla o no... créeme, cómprala, no esperes. Atrévete a dar el paso al futuro...

Sin otra cuestión que deciros, aparte de que me he quedado realmente satisfecho con la consola de Microsoft, me despido mientras la voy encendiendo para jugar un rato.

Salu2 a to2.